Impulsando a los jóvenes a través del coaching
En mi experiencia cuando hago coaching a personas jóvenes la mayoría se encuentran atravesando diferentes situaciones que pueden ser muy retadoras para ellos, como son: superar las exigencias de sus estudios, elegir qué carrera estudiar, la búsqueda de empleo, relacionarse exitosamente con sus pares u otras personas en general, gestionar sus emociones y quizás con el mayor de los retos, la construcción de su identidad.
Para apoyar a los jóvenes en este tipo de procesos, el coaching es un excelente aliado, pues con sus aportes les ayuda a crecer y madurar, a conocerse y aceptarse a sí mismos, y a establecer su propio plan de acción, su futuro y sus sueños, acercándolos a la realidad de la vida, con mayores garantías de éxito, crecimiento y felicidad.
Debido a que en el coaching se usan las preguntas poderosas, dando espacio y oportunidad para que el coachee encuentre sus mejores y propias respuestas y no hay contestaciones buenas o malas, no se juzga, no se dirige, no se critica, no se impone y lo importante es que el adolescente o adulto joven empiece a pensar sobre sí mismo; la dinámica permite que quien recibe el coaching descubra sus fortalezas, sus talentos, sus intereses y sus sueños. También con ayuda del coaching detectará sus miedos y sus creencias limitantes y la manera de transformarlas; todo esto para que comience a diseñar un plan de acción que lo lleve a obtener mejores y mayores resultados y lo prepare para su vida adulta.
En el coaching para jóvenes se aplican muchas técnicas y en mi caso lo combino con ejercicios, como por ejemplo de escritura, vídeos, juegos, entre otros; estos los elijo en consenso con el cliente y con el objetivo de inspirar y motivar a los jóvenes, darles la confianza para descubrir su potencial y diseñar estrategias para el logro de sus metas.
¿Qué se puede esperar de un proceso de coaching para jóvenes?
Varios son los beneficios que aportan a los adolescentes los procesos de coaching. En esa edad donde los cambios y las tensiones suceden, es importante hacer una intervención que apoye a estos jóvenes para encontrar su propio camino.
Entonces, en un proceso de coaching un joven podrá:
- Aumentar su autoestima y la conciencia de sí mismo
- Conocer sus fortalezas y habilidades sobre las que cimentar su futuro
- Conocer esas debilidades y miedos que lo paralizan
- Tomar mayor consciencia de su propia responsabilidad frente a su vida
- Mejorar el desempeño y los resultados académicos
- Aprender a priorizar
- Descubrir su potencial, sus sueños y orientarse alcanzarlos
- Mejorar sus relaciones sociales: con sus padres, en el colegio y con sus amigos.
- Aumentar su motivación
Es muy emocionante acompañar y ver cuando los jóvenes se responsabilizan de su propio desarrollo y toman consciencia de que el cambio debe comenzar por ellos, se sienten fuertes, crecen y empiezan a actuar de forma madura y protagonista en la consecución de sus objetivos. Es de destacar que el resultado de este proceso repercutirá en todos los ámbitos importantes de la vida del joven: familia, amigos, salud, relaciones sentimentales, estudios, diversión y planes de futuro.
En conclusión, el coaching para jóvenes está orientado a lograr que esos futuros adultos obtengan la conciencia de que ellos son los responsables de su propia vida y aprendan a desenvolverse con autonomía. Vale la pena anotar que las herramientas que proporciona el coaching personal le servirán para toda la vida, lo cual le da un valor agregado al proceso.
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